Shkodra, Albania — La ciudad de Shkodra se llenó de la alegría y vitalidad de unos sesenta jóvenes llegados de toda Albania, no solo para un encuentro o un paseo, sino para vivir una semana de servicio al estilo vicenciano. Estos jóvenes participaron en un campo de servicio junto a las Hijas de la Caridad, los Lazaristas (Congregación de la Misión), Juventudes Marianas Vicencianas (JMV), la Asociación de la Medalla Milagrosa (AMM) y otros jóvenes colaboradores de la Familia Vicenciana.

El campo ha sido -una rica experiencia de oración, servicio, formación, amistad y momentos de expansión que ofreció a los jóvenes la oportunidad de crecer en valores humanos y cristianos, fortalecer su relación con Cristo y profundizar en su solidaridad y amor a quienes se encuentran en diversas situaciones de necesidad.

Los temas de formación de este año fueron: Peregrinos de Esperanza, Inteligencia Artificial, la Vocación y la Virgen María en nuestra vida. Es verdaderamente maravilloso contemplar la generosidad, vitalidad, alegría y entrega de los jóvenes. Para nosotras, es un gran signo de esperanza para la Iglesia y para el mundo.
La experiencia de servicio a los enfermos, los niños, personas mayores, personas con discapacidad y a quienes atraviesan dificultades psíquicas suscitó en los jóvenes reflexiones profundas, hasta las lágrimas. Ellos vivieron esta experiencia como una gracia y una lección de agradecimiento por los dones de la salud, la familia y tantos otros bienes.
A través de este campo de servicio, la Familia Vicenciana sigue avivando la llama de nuestro carisma vicenciano.

