La colaboración entre los Equipos de San Vicente (FFESV), la Sociedad de San Vicente de Paúl (SSVP) y la Congregación de la Misión (CM) dio como resultado la creación de un Centro de acogida para unas veinte mujeres en 97 rue de Sèvres en París. El 12 de noviembre de 2020, con gran audacia, en medio de la cuarentena impuesta por Covid-19 fue posible abrir un centro con el nombre de “Accueil Louise et Rosalie”.
Con el leitmotiv «ir a las periferias» todos los socios trabajaron diligentemente durante tres años para superar todos los obstáculos, cada uno tocando su «parte»:
– la Congregación de la Misión proporcionando el lugar;
– los equipos de San Vicente y la Sociedad de San Vicente de Paúl para encontrar fuentes de financiación y buscar un diseñador de interiores para transformar un área de 160 m2 en un espacio práctico que cumple con todos los estándares, que son numerosos en Francia. (Fue necesario instalar un montacargas para la pequeña elevación entre el patio y el centro; permitiendo el acceso de una silla de ruedas a la diminuta cocina de 10 m2, etc.). Las fotos de este artículo ofrecen una idea del éxito del proyecto.
Ciertamente, por las medidas de salud se restringen los días de acogida, los horarios de recepción, el número de personas acogidas y las comidas servidas, ¡pero no las mujeres voluntarias que están todas allí para la cita!
Por la mañana, las voluntarias se reúnen con el coordinador del día que prepara una oración relacionada con el servicio seguida de un diálogo. También se benefician de los encuentros con los profesionales que sirven en el centro, de los momentos de atención espiritual, y de las «relecturas» periódicas, una reflexión e intercambio de hechos pasados para vivir mejor el presente.
Una Hija de la Caridad se ofreció a realizar los servicios de pedicura…
La Asociación ha optado por un procedimiento flexible, considerando que “el evento, es Dios” (Sor Susana Guillemin). Todo está por venir…
Así, las mujeres familiarizadas con la “falta de vivienda” encuentran en el Centro una acogida cálida e incondicional y una habitación bien climatizada; hay duchas, lavadoras, secadoras, un ordenador, un pequeño lugar para dormir o simplemente para acostarse y una comida que se sirve siguiendo las normas sanitarias. Ya se han organizado talleres durante los cuales se realizaron, por ejemplo, decoraciones navideñas. Las mujeres que frecuentan actualmente el lugar están en contacto con trabajadoras sociales, o fueron enviadas por otras asociaciones, han llamado al SAMU Social (teléfono del servicio médico de emergencia y asistencia para personas sin hogar), han podido consultar con una “Guía Solidaria”, o bien han llegado al centro «boca a boca».
¡Deseamos a esta nueva Asociación un feliz camino tras las huellas de la Providencia!
Entrevista a Madame de Villeneuve, directora de «Accueil Louise et Rosalie».